martes, 14 de abril de 2009

NOVELA ANDINA DEL LLAQTAMAQTA

NOVELA ANDINA DEL LLAQTAMAQTA

¡Por fin, hoy es o no es!, se dijo Juan, su corazón saltaba de alegría pero de pronto sus ojos se llenaron de lagrimas al recordar los desprecios y desplantes de María; él se había enamorado de la muchacha más bonita de Chungui, mas ella ni caso le hacía. La decisión estaba tomada, en la noche se lo diría, pensando en ello, tiró unas piedrecillas al río, testigo de sus penas pero al mismo tiempo, el majestuoso Chunguimayu fue su fuerza para insistir en su lucha y la inspiración para conquistar a su amada.Llaqta maqtakuna hamurunña…. ¡ya llegaron los muchachos del pueblo!...Pronunciaba en voz alta don Gerardo, uno de los campesinos mayores que tenía su estancia en Potoa Pata, ubicado en un cerro aledaño al río. Todas las muchachas casaderas de Chungui estaban ya, unas habían llegado desde las más lejanas estancias, otras eran del pueblo; se alegraron al escuchar a don Gerardo, los muchachos del pueblo llegaban con la música. La diversión estaba asegurada, sería una noche linda donde mezclarían sus melodiosas voces con los acordes amorosos de las mandolinas y las voces varoniles. Era noche de luna, de fiesta y amistad.Era la oportunidad que Juan estuvo esperando, había ensayado una canción para ella ¡por fin, la conquistaría! Aunque ya se había hecho la idea del rechazo, era la última vez que insistiría Había preparado su corazón para el rechazo y como varón tenía que hacer saber a María que no era un juguete, que él también podía despreciarla como ella lo hacía con él. ¡Quién entiende las cosas del amor!La noche avanzaba, el jolgorio se hacía más bullanguero, la alegría juvenil estaba en su cenit. De pronto Néstor le da un codazo a Juan y le dice: Ya pues Juan, mándate… Canta la canción, yo te acompaño… La María está contenta, te va a escuchar….Juan, sudando y nervioso, tragando saliva… alza su voz y dice: Escuchen… tengo una nueva canción… yo lo hice para María…...Ahhhh…. –pronunciaron todos- A ver canta pues -le dijeron las muchachas, que miraban de reojo a María que estaba colorada de vergüenza.Entonces, Juan canta acompañado por su mandolinaAgüita del río Chunguisi fueras cerveza te tomaría,si fueras licor te beberíaPara qué voy a tomarte,para que voy a bebertesabiendo que eres veneno sabiendo que eres mi muerte.Linda chunguinita, dueña de mi corazóntu boca melosa fue la causa para querertefue la causa para amartesi piensas que siempre voy a quererteque siempre voy a amarte, te equivocas ingrataen vez de quererte, en vez de amarte,al río Chungui yo me daríaal río Chungui me entregaríaEn medio del jolgorio general, por fin, Juan había declarado que ya no sufriría más, el mensaje estaba dado.María se sintió asustada, su pecho se comprimió de angustia porque Juan se alejaba de su corazón. Ya ni su juguete sería. Entonces, buscando el momento oportuno, mientras la muchachada cantaba y bailaba alrededor del fuego, María se dirige hacia Juan, que estaba lejos de todos, triste en su soledad.Juan… Juancitucha… perdóname… no pensé que estabas tan dolido… perdóname… dijo con voz temblorosa la bella María.No quiero saber nada de ti… Vete… déjame solo… contestó Juan fingiendo estar molesto.Ya pues Juan, no te hagas de rogar…. Discúlpame… rogaba María.Ya no quiero quererte, mucho te pedido que seas mi esposa, que seas el amor de mi vida… pero tu me has despreciado tanto… te has burlado de mi.. por eso para despedirme para siempre hice esa canción para ti…Entonces, María se mantiene en silencio un momento, reflexiona y le dice al muchacho:Juan… mírame.. mírame a los ojos.. Juan la mira, la muchacha le dice: Lo he pensado bien, perdóname por todo lo que te hice, tu canción me ha gustado mucho… tú eres el mejor muchacho que hay en Chungui… ya te estaba mirando y tienes tu carácter…eso me gustó de ti… ahora, con tu canción, me he dado cuenta que estaba enamorada de ti… Juan…. Te acepto… Acepto ser tu esposa…Era increíble lo que estaba escuchando, por fin, la muchacha de sus sueños era suya… El Maqtacha Juan emocionado abraza a María y la besa tiernamente, después de un rato juntos vuelven a la fiesta y todos los festejan y bailan alrededor de ellos. El Potoa Pata, una vez más, era testigo del nacimiento de un nuevo amor. Historias de amor como a esta, se habían repetido de generación en generación al son del “llaqta maqta”, de la mandolina y los cantos de amor de las muchachas y muchachos. ¡Era la costumbre!Meses después, Juan, con su inseparable mandolina, bien vestido iba acompañado de sus padres a la casa de María, a pedir oficialmente su mano. Era el “warmy urquy”, que significa: sacando a la muchacha, donde también se cantó y se bailó al son del Llaqta Maqta para expresar la alegría y felicidad de las dos familias. Cuando Juan y María techaron su casa en el wasi qispiy, y recibieron la cruz en el cruz apaykuku, cantaron y bailaron al son del Llaqta Maqta, costumbre que acompañará durante toda la vida a todo buen chunguino.¿Qué lecciones sacamos de este relato?PrimeroSi cortejas a una muchacha, hazlo con responsabilidad.Tal como lo hizo Juan con María, al entregar su amor para toda la vida.SegundoSi amas a alguien no lo hagas sufrir.No hagas lo que hizo María que casi pierde a Juan por sus desplantes.TerceroValora y practica las costumbres y tradiciones de tu tierra y la de tus padres.Tal como lo hicieron Juan y María al valorar y practicar la costumbre de sus ancestros: el Llaqta Maqta.

1 comentario:

  1. Hola Jose
    No te olvides de mencionar a los autores de este relato: Guillermo Huyhua Quispe y Rosa Arroyo Guadalupe, que lo narraron para Radio Exito en el Programa La Hora de la FEDIPA en Lima y luego publicaron en la página web CRONICAS AYACUCHANAS. Educando en valores, (http://cronicasayacuchanas.blogspot.com) Este cuento fue creado por la admiración que ambos tienen a la cultura de la provincia de La Mar. Y concluyen con lecciones para el aprendizaje de los jovenes y niños.
    Atentamente,
    GUILLERMO Y ROSA

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